Publicado el 24/08/2020

«Si la situación sanitaria mejora, el comercio será un factor decisivo en la reactivación» (El Mercurio regiones)

La líder gremial indica que el sector emplea a 400.000 personas, estima que el 70% de sus asociados ha visto caer ingresos operacionales en 50% y un tercio de los trabajadores se ha visto afectado. Confía también en la reapertura gradual.
A fines de abril, luego de permanecer 45 días cerrado por la crisis sanitaria del coronavirus, se reabrió el centro comercial Apumanque, en la comuna de Las Condes. Durante las pocas horas que estuvo abierto, más de 7.500 personas lo visitaron. Algunos criticaron la medida e incluso vieron en ella una de las causas del aumento de casos en el sector oriente de Santiago entonces.

Varios meses después, la imagen de una muchedumbre que espera para comprar en un «mall chino» en Santiago el mismo día en que la comuna dejaba la cuarentena tras 143 días, reflotó los temores del aumento de contagios y retroceso en la desescalada, justamente cuando se había empezado a vislumbrar una apertura de los comercios.

Esta semana también reabrió el Costanera Center en Providencia, y en regiones donde las cuarentenas se comenzaron a levantar mucho antes que en Santiago, el comercio ha empezado a abrir sus puertas. En algunas ciudades incluso lo han hecho centros más pequeños y outlets.

Aunque ni Apumanque ni los malls chinos son socios de la Cámara Chilena de Centros Comerciales, ella representa a más del 95% de estos negocios del país (Mall Plaza, Mall Marina, Vivo, Parque Arauco, entre otros) y su presidenta, la abogada Katia Trusich, cuenta que tienen presencia en todo Chile y que en un año normal estos lugares reciben alrededor de 750 millones de visitas.

Sobre los desafios que la situación sanitaria representa, sobre su futuro, sobre el aumento del comercio electrónico y su compatibilidad con el comercio presencial, además de la situación en que están a consecuencia de la pandemia, conversa Katia Trusich.

-Los centros comerciales parecen ser vistos como paradigmáticos de los peligros de la liberalización de las medidas: se consideró la influencia de una apertura prematura del Apumanque y se señalan ahora las colas en las comunas y regiones donde su funcionamiento será posible. ¿Es justo esto?

-Es comprensible que las autoridades y las comunidades busquen proteger la salud de las personas. Este es un objetivo que nosotros compartimos. Los centros comerciales, en general, han permanecido abiertos durante los períodos de cuarentena, prestando servicios esenciales como supermercados, farmacias, centros de salud, bancos y delivery de comida. Ha habido mucho trabajo en colaboración con las autoridades para tomar las medidas adecuadas y materializar una reapertura gradual y segura, donde además hay consideraciones de reactivación del empleo.

-Las aglomeraciones antes podían ser signo de éxito, ahora lo son de alarma. ¿Esto es un cambio sin vuelta?

-Hay muchas cosas que esta crisis ha cambiado. No solo en Chile, sino que en la mayor parte de los países del mundo, nuestro sector, el comercio en general, estamos buscando compatibilizar el resguardo de la salud de las personas con el reinicio de la actividad económica. Es posible hacerlo correctamente. Las aglomeraciones, en este momento, deben evitarse y los centros comerciales que forman parte de nuestra Cámara han adoptado medidas para ello. El llamado es a la prudencia a los operadores, y a los clientes a respetar las medidas sanitarias solicitadas por el personal de los centros comerciales.

-El sector comercio es uno de los más afectados con la crisis sanitaria. ¿Cómo diría que es, en general, el estado actual de los centros comerciales: estupendo, normal, malo, pésimo?

-Es importante tener presente que los centros comerciales forman parte de la cadena de abastecimiento del país, por eso muchos de ellos se mantuvieron operando parcialmente durante los meses más duros de la crisis. Claro que la crisis ha sido profunda y larga, para el comercio, que es el sector que más empleo da en Chile, un 20%, y para el país en general.

Nuestro gremio alberga a operadores grandes, medianos y pequeños. Para todos ellos el impacto ha sido fuerte. Hay que considerar que los centros comerciales dan empleo a 400.000 mil personas (en los 150 recintos de nuestros 15 asociados). Por eso, la reapertura gradual y segura representa mucho más que un acto de compra o de acceso a un servicio. Ha caído el consumo y la situación es muy dificil pero existe confianza en que la recuperación se inicie gradualmente.

-¿Hay estimaciones de cuánto ha sido el efecto negativo de la crisis sanitaria en la actividad de los centros comerciales y cómo ha afectado el empleo?

-El comercio, en general, ha caído en 20,6% según los últimos datos del Banco Central. De acuerdo a información interna de la Cámara, a más del 70% de nuestros asociados los primeros cuatro meses de crisis le han afectado sobre el 50%de sus ingresos operacionales. En cuan-
to al empleo, existen estimadores de que al menos un tercio de los trabajadores del sector han sido afectados por la pérdida del empleo o se encuentran con sus contratos suspendidos.
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-El sector comercio venía con problemas desde antes, considerando el estallido social, pero incluso con bajas previas. ¿La pandemia radicalizó una dificultad que podría tener otras razones o no lo cree así?

-El comercio es un espejo de la situación económica de cualquier país. La crisis social del año pasado afectó significativamente al comercio, tanto por la reducción del consumo como por hechos de violencia post estallido social. A principios de este año se notó una incipiente reactivación que lamentablemente fue interrumpida por la pandemia. Si la situación sanitaria mejora, el comercio será un factor decisivo en la reactivación económica futura.

-¿Cuántos centros están funcionando en el país actualmente?, ¿cómo es, a grandes rasgos, la situación en regiones y en la Región Metropolitana?

-La Cámara de Centros Comerciales tiene asociados a 150 centros comerciales en todo el país. Actualmente,110 de ellos están funcionando con distintos niveles de actividad y aforo, de acuerdo a las restricciones sanitarias de cada comuna. De estos 110, hay 45 en la Región Metropolitana y 65 en las otras regiones.

-Decía que siguieron funcionando los supermercados y los locales de comercio considerado esencial al interior de los centros. ¿Cómo ha sido funcionar con restricciones?

-Muchos centros comerciales han estado funcionando desde el inicio de la crisis con servidos esenciales: supermercados, farmacias, bancos, distribución de alimentos etc. Ello ha permitido ganar mucha experiencia en la implementación de los protocolos sanitarios que está sirviendo de forma relevante en este periodo de reapertura.

-Al haber diversos tipos de comercios, algunos pequeños y otros grandes, en los centros. ¿Cómo se ha tratado de ayudar a los arrendatarios en sus dificultades?

-Cada operador, en forma independiente y de acuerdo a su realidad, ha buscado las mejores maneras de colaborar y trabajar en conjunto con sus locatarios. Hay que considerar que nuestra Cámara alberga a una diversidad de empresas grandes, medianas y pequeñas, ubicadas de Arica a Magallanes con diferentes tamaños y negocios. Como gremio, por razones de libre competencia, no podemos intervenir en las negociaciones entre operadores y locatarios, pero es de público conocimiento que los operadores han adoptado medidas tales como condonación de arriendos, cosa que no ha ocurrido en todos los países, por ejemplo, México, Argentina, Estados Unidos, España; rebajas escaladas hasta fin de año en los arriendos y gastos comunes; facilidades de pago y otras soluciones similares. Pero estamos en medio de una crisis, comenzando a retomar la actividad, es tiempo de trabajar en conjunto.

-¿Cuáles serán, a su juicio, los mayores desafíos a la hora de que se generalice un proceso de reapertura de los centros comerciales?

-El principal desafio no sólo de los centros comerciales asociados a nuestra cámara, sino que de todo el comercio, es proteger la salud de los consumidores y trabajadores. Para ello, se han diseñado protocolos estrictos y se ha realizado un trabajo de colaboración con las autoridades para que el proceso sea gradual y seguro.

-¿Ya hay establecidos protocolos de higiene y sanitización?, ¿o alguna regulación del límite de aforo de las tiendas o centros, por ejemplo?

-Hay un protocolo que fue elaborado y publicado en abril pasado, trabajado en conjunto con el Ministerio de Economía, la Cámara Nacional de Comercio y nuestra Cámara. El protocolo recoge, por una parte, la experiencia internacional y, por la otra, buenas prácticas de otras industrias y gremios. Se buscó contar con medidas que resguarden la salud de trabajadores y consumidores, para que, cuando las condiciones sanitarias lo permitan, se materialicen reaperturas graduales y seguras. En este sentido, se ha dado énfasis en higienización, sanitización, distanciamiento físico y uso de elementos de protección, entre otros aspectos. Adicionalmente, muchos de nuestros asociados han incorporado medidas complementarias, han sumado tecnología y sistemas de punta para el control de aforo, temperatura, higienización, señalética, etc.

-¿Es útil considerar lo que está pasando en otros países respecto de estas aperturas?

-Absolutamente. Los países del hemisferio norte, especialmente de Europa, llevan al menos dos meses de delantera respecto a la realidad chilena. Todas sus experiencias han sido observadas por los centros comer-dales del país para acoger los aciertos y atenuar los errores que se han cometido en esos mercados. El uso de la tecnología es un aporte concreto de esa experiencia, además de la reiteración del llamado al autocuidado y la prudencia.

-¿Hasta qué punto el concepto mismo de centro comercial o mall puede estar en problemas? Por ejemplo, ¿podría el comercio electrónico reemplazarlos o se compatibilizará con el comercio presencial?

-La experiencia mundial indica que las tiendas fisicas y el comercio electrónico son completa y absolutamente complementarias. La mejor prueba de ello es que durante la pandemia todos los consumidores han tenido acceso al comercio electrónico, pero apenas ha sido posible, privilegian la experiencia presencial porque hay aspectos de ésta que no pueden reemplazarse. Además, el centro comercial tiene la ventaja de reunir en un solo lugar fisico distintos oferentes de bienes y servicios.

-La crisis económica que persistirá probablemente más allá de la sanitaria, ¿podría afectar más persistentemente a los malls?

-El futuro de la economía, tanto nacional como internacionalmente, dependerá en parte importante del comportamiento y el control de la pandemia. Es previsible que si se descubre una vacuna eficaz o medicamentos antivirales eficientes, la recuperación será sostenida y el comercio se recuperará de forma rápida. Por el contrario, si las condiciones sanitarias persisten, es previsible que exista una recesión prolongada en el mundo y en nuestro país.

-Las medidas sanitarias probablemente nos acompañarán un buen tiempo. La tendencia a hacer muchas operadores de compra rápidamente, sin perder demasiado tiempo, que ya existe, podría ser funcional a los centros que las consideren…

-La industria de centros comerciales es innovadora, dinámica y ha sabido adaptarse. Por algo varios operadores chilenos han exportado el modelo y tienen presencia internacional. Es un sector que conoce las preferencias y el comportamiento de los consumidores, por lo que se ha adaptado y seguirá haciéndolo.

-Pero la tendencia contraria ala rapidez, la de pasar largos momentos de esparcimiento o entretención, en cine o comida, se ve difícil que se recupere a corto plazo.

-Se está trabajando en un protocolo especial para los patios de comida y salas de cine, porque son muy importantes en los centros comerciales y la industria sabe que requieren cuidados particulares. En la medida que las condiciones sanitarias mejoren, la recuperación de estos sectores también será más rápida.

-¿Cómo ve el futuro próximo de los centros comerciales, cuando la apertura sea amplia, en términos de actividad y de seguridad?

-Los centros comerciales son un lugar de encuentro, forman parte de la cadena de abastecimiento del país y están profundamente amigados en la vida de los chilenos. En este sentido, como sector apostamos a seguir jugando un rol importante para las personas y aportar en la reactivación económica del país. La pandemia ha planteado desafios desde el punto de vista sanitario, económico y de sostenibilidad, pero ha significado grandes aprendizajes para toda la cadena productiva.

 

«La pandemia ha planteado desafios desde el punto de vista sanitario, económico y de sostenibilidad, pero ha significado grandes aprendizajes para toda la cadena productiva».

«La Cámara de Centros Comerciales tiene asociados a 150 centros comerciales en todo el país. Actualmente, 110 de ellos están funcionando con distintos niveles de actividad y aforo».

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